Ecuador tendrá por primera vez un alcalde abiertamente gay. ¿Por qué es simbólico su triunfo?

José Arroyo Cabrera ganó las elecciones del pasado 5 de febrero y será alcalde de Pujilí, un cantón con marcada presencia indígena. Es abiertamente homosexual, pero anticipa que no desea encabezar la lucha LGBTIQ+

DIEGO RIVAS Y VICTOR CARREÑO

En las elecciones seccionales del pasado 5 de febrero, José Arroyo Cabrera ganó la Alcaldía de Pujilí y su triunfo lo posiciona como el primer hombre abiertamente gay que liderará un gobierno seccional en Ecuador.

Arroyo ganó las elecciones con el 63,71% de los votos (uno de los resultados más altos en los últimos comicios) en un cantón con 52% de población indígena.

“Personalmente me llena y me enriquece saber que, quizás de una u otra manera, estoy colaborando para romper esquemas y marcar hitos históricos y, sobre todo, tratar que la gente pueda romper estereotipos que infundadamente nos colocamos y podamos ver el trasfondo de cualquier persona”, señaló Arroyo en una entrevista a Diario El Comercio.

Arroyo llegó con propuestas como incrementar la cobertura de agua potable y alcantarillado, regenerar y construir espacios comerciales y comunitarios, brindar atención médica primaria a niños, adultos mayores, mujeres embarazadas y personas en pobreza extrema, y construir vías urbanas y rurales.

En Pujilí, más del 80% de la población es rural. En su plan de trabajo sus propuestas consideran las asimetrías entre el sector urbano y rural del cantón. Por ejemplo, en su plan detalla que la cobertura de agua potable en el área urbana es de 64% y en el área rural, 36%.

Un pasó más en la participación política

“Las personas LGBTIQ+ han sido históricamente violentadas, invisibilizadas e instrumentalizadas en la política. Que hoy un hombre gay sea elegido como alcalde es un hecho que sí debe celebrarse, pero sin perder de vista que esto ocurre recién en 2023”, indicó Andrea Villavicencio, activista del colectivo Status Queer. 

Arroyo triunfa en el mismo cantón en el que el actual alcalde, Luis Ugsha, quien buscaba la reelección, lanzó un discurso homofóbico en el cierre de su campaña. Ugsha calificó a la población LGBTIQ+ de “plaga, demonios contra la ley de Dios”.

Por estas declaraciones, la campaña Acuerdo por la Igualdad Voto LGBT+ pidió al Tribunal Contencioso Electoral que sancione a Ugsha por incitación al odio. Asimismo, la Secretaría de la Mujer pidió investigar el caso.

En la entrevista a Diario El Comercio, Arroyo comentó que durante la campaña electoral en Pujilí “nadie hablaba de mis propuestas o de mi trabajo, únicamente se hablaba de mi sexualidad”.

Por esa violencia y discriminación, la política ecuatoriana ha estado caracterizada por la ausencia de personas LGBTIQ+. Recién en 2006 participaron por primera vez cuatro personas de la diversidad en elecciones. Buscaban llegar a la Asamblea Constituyente que redactó la actual Constitución, pero no lograron curules.

En 2009, Sandra Alvarez, activista lesbiana, ganó una curul como asambleísta alterna. En 2017 hubo una participación más activa: 15 candidaturas de hombres gais y mujeres trans para asambleístas, entre principales y suplentes, según el informe Por una Democracia Diversa de Fundación Esquel. Ese año, la activista trans Diane Rodríguez, presidenta de Silueta X, fue electa asambleísta alterna. 

El reporte destaca que en años anteriores a las elecciones de 2017 las candidaturas no fueron mayores a 8.

José Arroyo Cabrera ganó la Alcaldía de Pujilí con el 63,71% de los votos. Es una de las votaciones más altas en los comicios del pasado 5 de febrero. | FOTO TOMADA DEL FACEBOOK DE JOSÉ ARROYO

“El derecho a la participación política está consagrado en la Constitución, la cual debería garantizar de manera efectiva una representación directa y sobre todo diversa. Las oportunidades de que personas LGBTIQ+ en Ecuador puedan gozar de este derecho han sido limitadas, debido a que los entornos políticos siguen siendo violentos, machistas y altamente homofóbicos”, comentó Danilo Manzano, director de Diálogo Diverso y coordinador del informe Por una Democracia Diversa.

Actualmente, en la Asamblea Nacional, Jahiren Noriega, quien es abiertamente bisexual, se principalizó como asambleísta por Pichincha. Noriega era la alterna de Pabel Muñoz, quien participó en las elecciones para la Alcaldia de Quito. Ella trabaja activamente por las personas de las diversidades sexo genéricas.

“No pretendo portar ninguna bandera”

Aunque en redes sociales activistas apluadieron la elección de un candidato abiertamente gay, en el plan de trabajo del futuro alcalde de Pujilí no hay propuestas para las personas de las diversidades sexo genéricas.

“Todo proyecto político debería incluir aspectos enfocados en las personas LGBTIQ+, ya que estas tienen igualdad de derechos, y no mencionarlas es en sí dejar de lado a ciudadanxs ecuatorianos”, señaló Andrea Villavicencio, de Status Queer.

Si bien José Arroyo es abiertamente gay, y calificó como “hito” su elección, o resaltó que es un paso para conquistar más derechos, anticipó en su entrevista para El Comercio que su gestión no estará ligada a la lucha LGBTIQ+.

“No pretendo portar ninguna bandera, ni encabezar una lucha de ninguna minoría. Yo solo quiero ser el alcalde de Pujilí”.

Diego José Rivas

Periodista e Investigador Social. Maestrante en Comunicación y Opinión Pública en FLACSO-Ecuador como becario por Excelencia Académica. Premio Eugenio Espejo UNP 2023.

Víctor Hugo Carreño

Fundador y director editorial. Magíster en Periodismo, Diplomado en Comunicación, Género y Derechos Humanos, y becario del International Center for Journalists. Sentí culpa por ser gay y me encerré en el clóset casi hasta los 30 años. Hoy, con orgullo y aguantando aún señalamientos, defiendo y hago un periodismo que vigile el cumplimiento de derechos LGBTIQ+.